Los signos del zodíaco Virgo y Virgo  

No se busca y se encuentra

Entre dos Virgo puede surgir una verdadera alma gemela. Una relación en la que comparten los mismos intereses, aman el mismo vino, tienen los mismos miedos y en la que superan y afrontan los retos de la vida de forma similar. Aquí es donde se desarrolla una verdadera asociación en la que puede que no os hayáis buscado el uno al otro, pero sin embargo os habéis encontrado. Porque: Ni el hombre Virgo ni la mujer Virgo se caracterizan por desviarse excesivamente de su camino. 

Una vez que ambos se han descubierto, la cuestión sigue siendo quién dará el primer paso. Tanto la mujer Virgo como el hombre Virgo son más bien introvertidos. Les favorece la relación distanciada de sus sentimientos. Pero con una contraparte tan especial y que promete permanencia, deberían reunir el valor suficiente para no dejar escapar esta oportunidad.

Falta dinamismo en su relación

Debido a tanta unión, de vez en cuando falta la chispa en su relación. No son espontáneos ni demasiado apasionados. Para dejar que se desarrolle el romance, les falta acceso a sus sentimientos. En esta constelación, el amor puede dar paso tarde o temprano a la costumbre. Así, el amor inicial se convierte en puro aburrimiento. 

Existe el peligro de que se parezcan demasiado. Con demasiada frecuencia se reflejan en su pareja. Todo menos una circunstancia favorable para los Virgo autocríticos. De repente, descubren defectos en la persona amada con los que ellos mismos están luchando. La combinación de cansancio y frustración crea una atmósfera de odio y reproche.

Como pasan tanto tiempo juntos, se dan cuenta de que falta un equilibrio. Se aconseja a ambos que salgan solos más a menudo. Necesitan salir de su propia motivación. Su amor necesita condimento. Si se lo toman en serio, ahí reside el potencial de una unión eterna.