EL HOMBRE PISCIS

El hombre Piscis está rodeado de luces y sombras

Es más un alegre pez de colores que un peligroso tiburón en los negocios. Un romántico, no un macho. Comprende a las mujeres en lugar de despreciarlas. El hombre Piscis ama y aprecia cuando su amor se encuentra con un amor recíproco. Para él, todo gira en torno al tema de los sentimientos, el amor y la pareja. Por lo general, no encontramos asperezas en él. Además, no lo vemos saliéndose con la suya sin piedad.

Le cuesta salirse con la suya y prefiere aguantar que expresarse. La gente espera en vano que él les dé su opinión. Por esto y por no tener una opinión fija, huye de los conflictos. Da vueltas sus pensamientos como un juguete, reflexiona y piensa hasta que decide que mañana también será un buen momento para tomar una decisión. Sus admiradoras lo pasan mal, especialmente si esperan que él tome la iniciativa.

Los hombres Piscis viven el momento

Este hombre bonachón vive el momento y prefiere confiar en su intuición. Como vive el día a día, las estructuras fijas y las rutinas le repugnan. Como regla general, parece distraído y despistado para los extraños. Sin embargo, esto explica gran parte de su carisma.

A las mujeres les gusta su naturaleza soñadora y con él pueden esperar sentimientos profundos y comprensión. Se toma en serio el amor, por lo que crea un clima de confianza con su carisma. Con la pareja adecuada, muestra su talento para el arte y su creatividad. El hombre Piscis es artísticamente activo, y por lo general tiene un pasatiempo a su lado.  

¿Se le escapa el dinero entre los dedos?

Su pareja no debe hacerse ilusiones de que su esposo será constante y continuo. Tienden a ser volubles en lo que hacen, y su estado de ánimo les influye mucho. Para la mayoría de mujeres este estilo no es sostenible a largo plazo.

A menudo el hecho de que el dinero se les escapa de las manos es un agravante. Despilfarro no es un término válido para los hombres Piscis. Ven los medios de pago únicamente como un medio para un fin. Debido a esto, rara vez son ricos o prósperos. Supeditan todo al momento y suelen saber que nada les pertenece. Una cosa no cuadra con el hombre Piscis: el aburrimiento.